No hay nada más lindo que sentir algo por alguien. La emoción que sentís cuando te habla, cuando te mira o cuando te abraza. La felicidad que tenés cuando todo está perfecto, cuando todo sale bien. Esperás e imaginás cada momento perfecto en el que pasa algo con esa persona. Esperar (por más que sea eterno) es muy lindo. Emocionarte con cada detalle, con cada segundo, con cada cosa; que cuando pasa, te morís de la felicidad. Muy lindo, no? Todo lo que queremos llega, en algún momento llega. Y sí, cuando llega sos la persona más feliz del mundo. Y si nunca llega, o llega en el momento equivocado, es porque seguramente no era lo mejor para vos.